El perchero Nerocactus diseñado por Guido Drocco y Franco Mello para Gufram està realizado con poliuretano blando y su acabado hecho a mano con Guflac de color negro.
Cactus, que ha sido objeto de innumerables interpretaciones, libres y a menudo ambiguas, representa el ícono del diseño italiano que ha revolucionado el paisaje doméstico. El Cactus de Gufram, hecho de poliuretano flexible, es suave y sin espinas. Este perchero dispone de cuatro brazos en voladizo, es tan alto como una persona, y parece un tótem irónico que encarna la energía, la fantasía y el humor del interiorismo de los años 70. Capaz de llamar toda la atención, se desentiende del funcionalismo a ultranza porque puede cumplir con su función de perchero o puede ser utilizado como un elemento de decoración.
Se creó en 1972 y desde el primer momento desafió ese mundo estático y rígido del diseño de muebles. Realizado completamente a mano, cada pieza es única. De hecho, los 2165 elementos que sobresalen y que caracterizan su superficie, están elaborados a mano uno a uno, por personal especializado y posteriormente pintados con Guflac. Este acabado es único y especial, patentado por Gufram que permite al poliuretano que forme una protección y mantenga su flexibilidad y suavidad.
De color verde, blanco, rojo, negro e incluso multicolor, a lo largo de los años el Cactus ha sido reinterpretado en varios colores y ediciones limitadas y numeradas, que lo han convertido en un objeto de culto hasta llegar a ser expuesto en los museos más importantes del mundo. En 2018 sale una reedición verde.